miércoles, 19 de septiembre de 2018

Lexington dress

Hola chic@s! Técnicamente el próximo domingo comienza el otoño. Por eso, y a pesar de que aquí rozamos los 35 grados y lo seguiremos haciendo durante al menos un par de semanas más, os muestro hoy el último vestido del verano. 
Podría decir que ha sido EL VESTIDO DEL VERANO con mayúsculas porque, con diferencia, ha sido el que más ha usado mi hija. Se trata del Lexington Dress de Little Lizard King. 
Y ahora vais a ver por qué le gusta tanto.


 
Esa espalda casi  completamente al aire es un plus añadido a casi cualquier prenda para toda aquella niña a la que le encante enseñar cacho. Como sabéis mi hija desde pequeñita alucina con las prendas que enseñan (aún no pierde la esperanza de que le haga un vestido palabra de honor...jajajaj). Así que cuando ví ese modelo en IG sabía que se lo tenía que coser sí o sí. 


La confección del vestido es realmente sencilla y apta para principiantes con algo de experiencia. Como veis el delantero del vestido va cruzado y rematado con dos tirantes que son los que se cruzan detrás. Por detrás se ajusta con un par de tiras de elástico que lo hacen muy cómodo. Sí es verdad que para ponerselo la niña necesita ayuda, sobre todo por el tema de colocar bien los tirantes traseros. 
El cuerpo del vestido va forrado de una batista fina en color fucsia. Los tirantes son también de esa tela para hacer contraste. 


El patrón ofrece muchas posibilidades para hacerlo más o menos formal según vuestras necesidades. Hay algunas versiones con tul ideales para eventos de verano. Como yo quería algo muy ponible, escogí la versión más sencilla. Y ha sido todo un acierto porque mi hija lo ha usado muchísimo. 


La tela es un algodón fresco con estampado de flores creo que de Julián López (aunque no recuerdo bien). Al principio pensé que quizás a mi hija le iba a resultar demasiado infantil, pero se ve que no. Así que punto para mí. 
Es un patrón que me ha encantado coser. Es sencillo y rápido y las instrucciones son  claras y concisas (en ingles). En una tarde lo tienes listo. 
Seguramente lo repetiré el año que viene visto el éxito que ha tenido. 

Pues ahora sí, hasta aquí han llegado las costuras de verano. Me he dado cuenta de que no he blogueado un par de vestidos de Elena que le cosí la pasada primavera, pero que no sé si me va a dar tiempo publicarlos antes de que se le queden pequeños.
¡Que tengais un feliz miércoles y hasta la próxima!

PATRÓN: Lexington dress de Little Lizard King

TALLAS: 12 meses-14 años. Yo he hecho la talla 7 de ancho y la 8 de largo.

TELA: Algodón 100%. Batista para el forro

DIFICULTAD: Principiantes con algo de experiencia.


viernes, 14 de septiembre de 2018

Organizar un armario cápsula para niños (Tercera Parte)

Hola chic@s! Sigo con la serie de entradas dedicadas a la organización de un armario cápsula para mis niñas. Si recordáis os dejé haciendo revisión de la ropa que tenemos en casa y clasificando la ropa por montones.

Clasificamos la ropa por montones. La que sirve para este año, la que donaremos, la que heredarán hermanos pequeños u otros niños y la que resulta inservible y es para tirar.

Una vez hecho expurgo de nuestros armarios ya estamos en condiciones de señalar qué nos hace falta. Aquí viene la madre del cordero. Para que funcione la idea del armario cápsula necesitamos que las prendas combinen entre sí en la medida de lo posible. Una cuestión fundamental para ello es escoger unos colores de base que sean fácilmente combinables y no abusar de los estampados. Los colores primarios son la clave. Los tonos burdeos, verde botellas y azul marino son fácilmente combinables y excelentes para el invierno. Se pueden combinar con gris,  mostaza o rosa palo si quieres darle un toque de color. 
Yo he descartado las tonalidades violetas, naranjas y marrones que me resultan más difíciles de combinar. Pero eso está en tu gusto y en las combinaciones que puedas hacer con la ropa que ya tienes. 
En cuanto a los estampados he preferido que las partes de abajo sean en la medida de lo posible lisas para poder combinar con camisetas con dibujos que es lo que más les gusta a los niños. Seguro que vosotras también habéis caído en la moda de las lentejuelas que se cambian al pasarles la mano...jejeje.

Las partes de abajo lisas y de colores básicos te permitirán hacer múltiples combinaciones. Las camisetas en tonos blancos o claros también facilitan la tarea de hacer conjuntos.

 
Una vez calsificada la ropa ya puedes anotar lo que te hace falta comprar o coser para completar el armario de tu hij@ y tras ello, comenzar a disfrutar de un armario simplificado pero funcional.
 
En este punto es donde las mamás costureras decidimos qué comprar y que coser. Reconozco que la ropa que más usan mis hijas es la ropa de colegio, pero que también es la ropa que menos me estimula coser. En mi ciudad no encuentro telas de punto con demasiada facilidad y hay que aguantarse con lo poco que hay y al precio que lo pongan, que no suele ser competitivo con lo que hay en las tiendas. Este año he hecho propósito de enmienda  y  ya estoy cosiendo algunas prendas de sport que pronto os enseñaré, aunque supongo que la ropa de calle será la que más cosa. 
Esta es la lista de prendas que quiero coser para las niñas (el resto lo compraré en tiendas):

IRENE ELENA
2 blusas/camisetas monas 1 chaqueta ligera
1 cárdigan 1falda
2 faldas 1 abrigo arreglado
1 vestido
1 abrigo arreglado
1-2 chándales

Ya solo queda elegir las telas necesarias y los patrones y empezar a coser. 
 
Por último, antes de dar por finalizado esta serie de posts, me gustaría hacer referencia a una serie de prendas que no se consideran dentro de la cápsula pero que son importantes tener en cuenta en tus compras o costuras.


Este tipo de prendas no forma parte de la cápsula porque varía mucho de una persona a otra según sus necesidades. Por ejemplo la cantidad de ropa de fiesta variará según las costumbres de cada familia. Habrá temporadas en las que no necesites nada y otras en las que necesitarás varios modelos.  
En mi caso, la ropa interior y casi todos los pijamas son prendas que suelo comprar, aunque este año ya he comenzado a coser algunos pijamas para la mayor.  Lo que yo considero ropa de deporte es la ropa que utilizan mis hijas para ir a clase de equitación que también las compro en tiendas, aunque en este apartado añadiré un conjunto deportivo más para las actividades al aire libre que solemos hacer durante el invierno.  En cuanto la ropa de fiesta, aquí incluiré un modelo para Navidad. 


Pues esto ha sido todo. Espero que os haya gustado la idea de hacer un armario minimalista y más racional y que os sirva para, al menos en este aspecto, simplificaros el trabajo y vivir mejor. 
Yo me comprometo a contaros mis impresiones y resultados una vez que termine el otoño. Os diré cómo me ha ido este sistema y si lo renovaré para lo que quede de invierno. 
Besos!

miércoles, 12 de septiembre de 2018

Organizar un armario cápsula para niños. (Segunda Parte)

Hola chic@s! ¿Qué os pareció el post anterior? ¿Os dió que pensar el tema de los armarios minimalistas? Si os interesa el tema seguid leyendo esta entrada porque hoy continuo precisamente donde lo dejé.

Tras los consejos de la entrada anterior y una vez tenidos en cuenta todos los aspectos de la vida de nuestros hijos, vamos a plasmar sus necesidades de ropa en prendas concretas.

Aunque en teoría habría que hacer un armario para los tres meses de otoño y otro para los tres meses de invierno, yo he hecho una mezcla otoño-invierno ya que aquí apenas tenemos otoño y muchas prendas de verano se usan hasta casi final de octubre añadiendo alguna chaqueta o rebeca a primera y última hora del día. Sin embargo, cuando cambie la estación sí tendré que sustituir los legging y camisetas más finos por algo más grueso y camisetas de cuello vuelto. Si en vuestro pueblo o ciudad no ocurre esto, sólo tendréis que hacer una previsión para los tres meses de otoño y después para los tres meses de invierno.
Por otra parte, mis hijas no llevan uniforme escolar. Por eso gran parte del armario va a estar compuesto por prendas cómodas para ir al colegio. 
Yo he hecho la siguiente división: 
 

 

La división que he hecho arriba no es una división matemática e inamovible. De hecho hay prendas que podríamos llamar polivalentes y que servirían para cualquier ocasión. Cuando por ejemplo señalo un pantalón multiusos, pienso en un pantalón vaquero o similar y que puede valer tanto para ir un día a clase como para salir arregladita con una blusa mona. 

 
Ahora viene lo más difícil que no es otra cosa que indicar el número de prendas que necesitamos. 
 Yo os enseño las que he puesto aquí. 




Me salen 37 prendas. Hay que tener en cuenta que la filosofía de la cápsula permite comprar o reponer las prendas que se estropean o se rompen. Una prenda nueva por una que sale de nuestro armario, para mantener el número máximo de prendas. 
Sin embargo yo no voy a ser tan radical y  os explico un pequeño truco. El truco es muy sencillo: la ropa que tenemos ya y que nos vale sigue estando en nuestro armario. Voy a intentar no comprar/coser más ropa del número que indico pero no pasa nada si ese número se sobrepasa con las prendas que ya tenemos. Es decir, he indicado 10 camisetas de manga larga para Irene, pero si en casa ya tenemos 12 o 13 que le valgan, voy a dejarlas todas.

En cuanto a los zapatos, reconozco que aquí voy a tener un problema porque eso de comprar unos zapatos azules marino o negro y que peguen con todo es algo que me supera. Yo sería feliz con tener todos los colores de zapatos como los de la foto..jejeje... pero me comprometo a intentar no pasarme y me entrujaré el coco para intentar combinaciones con un par de pares de zapatos. 


Si has llegado hasta aquí te diré que ahora empieza lo más feo y que no es otra cosa que sacar la ropa del año pasado y comprobar lo que se puede aprovechar y lo que no. Lo que pueden heredar los hermanos pequeños, la ropa que hay que tirar y la que se puede donar. Hay que intentar hacer conjuntos con la ropa que nos sirve y en teoría hay que deshacerse de todo lo que no nos vaya a hacer falta. 
Sin embargo yo no voy a ser tan radical con el armario de las niñas. Mi experiencia me dice que a veces hay que tirar de fondo de armario y rebuscar una camiseta roja para un baile o unos leggings blancos para una obra de teatro. Mientras les siga valiendo de talla y esté en condiciones de uso yo voy a procurar mantenerlo. Porque madre precavida vale por dos.. o porque no creo que pueda acabar de un plumazo con mi síndrome de Diógenes..jeje

 
Os dejo con el cambio de armario y en la próxima entrada te cuento los últimos pasos para organizar nuestro armario cápsula. ¿Seremos capaces de llevar a cabo esta filosofía hasta el final?

Un besote.



Pd. os dejo aquí el enlace al cuadrante por si os sirve.

lunes, 3 de septiembre de 2018

Organizar un armario cápsula para niños. (Primera parte)

Hola chic@s! Comienza septiembre y un nuevo curso lleno de proyectos de cara a la nueva temporada de otoño-invierno. Este mes de agosto no he cosido demasiado pero sí he pensado mucho sobre lo que necesito y quiero coser .

Seguro que más de una vez te ha pasado que ves una patrón monísimo, un auténtico cvcq, lo necesitas, lo coses, haces la foto para Instragram, y el blog y la prenda se queda colgada en el armario durante semanas, hasta que te das cuenta de que en toda la temporada se ha usado 3 veces.

A mí esto me pasa últimamente con demasiada frecuencia y la verdad es que me da pena y rabia al mismo tiempo. Me consuela saber que la prenda podrá ser heredada por mi hija pequeña, mi sobrina o alguna amiga. Pero eso no siempre compensa el gasto de tiempo y recursos que ello conlleva por muy bien que me lo haya pasado cosiendo la prenda en cuestión.

Vestidos de verano de Irene de esta temporada




 
A raíz de estos pensamientos (he estado yo muy filosófica estas vacaciones) me puse a investigar sobre el tema de los armarios minimalistas, también llamados armarios cápsula. Esto no es más que un armario compuesto por un número limitado de prendas que combinan entre sí y que te permiten obtener una serie de outfits completos y variados para toda una temporada. Los defensores de este concepto juran que tu vestuario no es repetitivo y que no llegas a cansarte y que, además, es una forma de racionalización del consumo y casi de tu propia vida. 
 
El número de prendas para hacer la cápsula varía según cada maestrillo. Por lo visto Dona Karan presumía de hacer todo un armario con tan solo 7 prendas. Sin embargo, por lo que he estado leyendo, lo normal es contar con un número variable de entre 33 y 37 piezas entre las que no se cuentan la ropa interior, pijamas, ropa de deporte, complementos y ropa de fiesta. Se supone que ese número de piezas es el suficiente para vestir durante 3 meses. 

¿Podré hacer una armario con tn pocas prendas?

  
Aunque yo no creo que pueda llevar a cabo esta filosofía del orden hasta tal extremo, la verdad es que me he sentido inspirada y he decidido aplicarla al armario de mis hijas de cara a la nueva temporada.

Después de documentarme os voy a señalar unos tips que debemos tener en cuenta para organizar un armario cápsula de otoño-invierno para niños, ya que éste varía un poco respecto de los armarios de adultos. 

  • EDAD DEL NIÑ@: para empezar a organizar tu cápsula debes en primer lugar tener en cuenta la edad de tu hijo o hija y las necesidades que ello conlleva. No es lo mismo un bebé de pocos meses que va en su carrito tan divino que un niño de guardería o un preadolescente. Por decirlo familiarmente el nivel de “guarreo” de cada uno es completamente diferente. 
     
  • ACTIVIDADES DEL NIÑ@: lo anterior nos lleva a analizar el tipo de actividades que nuestros hijos suelen realizar. En inverno la mayor parte del tiempo se la lleva el colegio, por eso si llevan uniforme para el cole y/o guardería reduciremos considerablemente el número de prendas que vamos a necesitar. Si no, habrá que hacer un buen acopio de mudas sobre todo si el niño es chiquitín. También habrá que tener en cuenta si realizan actividades extraescolares fuera o dentro del colegio. Y si pasan mucho o poco tiempo en casa de los abuelos u otros familiares donde siempre es bueno dejar alguna muda.


  • RITMO DE VIDA FAMILIAR: Debes tener en cuenta el ritmo de vida de tu familia y tus costumbres a la hora de salidas y actividades de ocio. Si sois de los que pasáis la mayoría de los fines de semana haciendo actividades en la naturaleza, las prendas más formales pasarán a un segundo plano, mientras que si sois de actividades más sociales o acudís a eventos con frecuencia, tus hijos necesitarán prendas más arregladas. No obstante, como regla general (al menos en mi caso) en invierno no sale tanto como en verano y los momentos de “lucimiento” decrecen. 
     
  • LUGAR EN EL QUE SE VIVE: Otro dato importante a tener en cuenta es el lugar en el se vive. Por ejemplo, aquí abajo tenemos temperaturas suaves en invierno con lo que los abrigos los usamos como mucho tres o cuatro meses. Sin embargo en las zonas del norte los abrigos se usan mucho más tiempo e incluso tienen ese híbrido extraño llamado “abrigo de verano”.


  • ORGANIZACIÓN DE LA COLADA: Relacionado con lo anterior y aunque no parezca muy glamuroso hay que tener en cuenta nuestro propio ritmo de coladas y si disponemos de secadora o no. Puede parecer una tontería pero mi hijas el año pasado tenían Educación Física dos días seguidos, por lo que me era imprescindible tener como mínimo dos equipaciones para cada una (tenía un par más de repuesto). No me daba tiempo a lavarlos y secarlos de un día para otro, sobre todo este pasado invierno en el que ha llovido tanto. No me quiero ni imaginar en el norte. Es importante tener ropa suficiente para no quedarnos cortos en caso de que se nos acumulen prendas por lavar. 
     
  • GUSTOS Y ESTILO DEL NIÑ@: esto último lo añado yo de mi propia cosecha y creo que va dirigido a casos de niños mayorcitos que empiezan a imponer su estilo. Los niños pequeños suelen vestir conforme al gusto de sus padres pero llega una edad en la que ellos empiezan a discriminar entre lo que les gusta y no. Mi hija era y es apasionada de vestidos, faldas y complementos muy femeninos. Sin embargo, por el ambiente que tiene en clase y supongo que por no destacar, para el cole ya prefiere ir como van las demás niñas en un estilo mucho más sport y desenfadado a veces para mi propio horror cuando se pone de moda alguna horterada.

 
Una vez tenidas en cuenta estas ideas, pasaremos a plasmarlas en prendas concretas con las que diseñar nuestro armario. Pero eso te lo cuento en el próximo post para no cansarte demasiado. 
¿Y a tí? ¿te interesa la organización de este tipo de armarios o piensas que es imposible vestir a un niño con un número reducido de prendas?
Te dejo pensando. Un besote!