Pippa Pants y Olga Top

Hola chic@s! Menos de un mes para el verano oficial y para las vacaciones escolares. Y digo verano oficial porque este es uno de esos años en los que el calor que nos instala en mayo con una intensidad propia del mismimo mes de julio. 

Con este panorama se hizo indispensable coser prendas de verano pensando en el mes de clase que aun queda y el calor que ya pasan los niños en el patio. 

Como todos los años comienzo los armarios de verano cosiendos shorts. No importa cúantos tengamos que siempre parecen pocos. Pero a mí es una costura que me gusta porque es rápida y resultona. 

Este año opté por probar el patrón gratuito de los Pippa Pants del blog Emma en Mona. Se trata de unos shorts en dos piezas que pueden hacerse en cualquier tipo de tela aunque se recomienda tela de punto.  Últimamente mis niñas demandan más prendas de punto porque siendo para el cole creo que se sienten más cómodas.

Para mis dos niñas hice la talla 134-140. A la peque le queda más pegadito tipo leggings pero ella dice que está supercómda. 

Como veis los pantalones tienen una vuelta en el bajo y el elástico de la cintura va inserto en el propio pantalón, sin necesidad de una pieza de cinturilla. Creedme si os digo que se hacen en 45 minutos. 

Aproveché la tela de los dragones de las sudaderas que cosí a finales de invierno (aquí), así que ella va la mar de contenta. 

A la mayor también le hice unos Pippa Pants en la misma talla, aunque se le ven más holgados porque ella es más delgada. 

Como me había sobrado tela decidí coser una camiseta a juego. Elegí el patrón del Olga top que también nos ofrece de manera gratuita el blog de Emma en Mona. Sin embargo al coser el top tal cual viene en patrón, el conjunto me daba la sensación un poco de pijama. Para arreglarlo hice un par de modificaciones. Añadí un bolsillo canguro sacado de la Ottobre y un puño en el bajo para logar un efecto "sudadera de verano". Para contrastar usé un puño color gris a juego con las patas de las llamas y creo que ha resultado un conjunto muy original. 

La manga se remata con una especie de vuelta. Es un remate que me gusta mucho porque queda muy limpio aunque en la foto se ve la costura interiior porque es dificil que se quede en su sitio a pesar de las puntadas que le dí. 

En definitiva puedo decir que son unos patrones que me han gustado mucho. Se cosen rápido (la tres prendas en una tarde productiva) y que a las niñas les encantan por su comodidad.

Hasta quí la entrada de hoy.  Ánimo que en nada estamos de vacaciones. 

PATRÓN: Pippa Pants y Olga top de Emma en Mona

TALLAS: 86-92 a 158-164 (18 meses-14 años aprox. ) Yo hice 134-140

TELA: Punto Dragones de Niko Niko Sew y Punto de Llamas de Galerías Madrid.

DIFICULTAD: Principiantes con algo de experiencia en punto. 

(La instrucciones y el blog están en neerlandés, pero hay fotos explicativas que hacen que no haga falta traducir)

¡Vámonos pa' la Feria!

Hola chic@s!

¿Sabéis esa sensación cuando observas una prenda comprada, la miras y remiras por dentro, te vienes arriba y te dices :"Bah!, eso me lo hago yo con la gorra"?

Pues así empezó la historia de mi nuevo traje de flameca. 

Vaya por delante que yo no tengo casi ni idea de patronaje, al menos de señora, pero después de mirar el último vestido de flameca que tenía (comprado) y estudiar sus interioridades me lancé a la piscina y saqué el patrón colocando la prenda directamente sobre una tela. Vamos, que el método es bastante poco ortodoxo, pero allá que fui. 

Tras una muselina que me quedó más o menos apañada y con ayuda de mi madre para ajustar el vestido en las partes en las que no me veía, me corté y cosí el vestido en unos cuantos ratos que fui arañando al reloj. 

Sabéis que coso poco para mí, pero una serie de factores se unieron para tomar la decisión final de coserme un nuevo vestido: la primera, y la que más peso tuvo, era que el vestido del año pasado me quedaba bastante apretado, así en modo morcón. La segunda era que las niñas estaban apañadas. Elena llevaría el vestido de la hermana, e Irene uno de mi prima. Con lo cual me lancé a coser sin ningún remordimiento. 

 Para esta ocasión y después de un par de vestidos con unos estampados muy llamativos, me apetecía volver al clásico vestido de lunares. La hechura, que como os he comentado es copiada de mi anterior vestido, es bastante cómoda, pues marca la figura lo justo y necesario para permitir andar cómodamente gracias a la forma evasé que adopta el final del cuerpo. 

La falda se compone de dos volantes montados sobre una falsa faldilla de nejas y cancán para dar un poco más de volumen. Los volantes está rematados con un encaje de bolillo a juego con la tela.

Elegí una tela de satén-lycra en color bugambilla-vino rosado, que es un infierno de fotografiar porque el color varia con la luz que le dé. Los lunares son de color crudo y al verdad es que el contraste me encantó. He tenido que hacer malabares porque en el rollo solo quedaban 5'40 metros, que para un traje de flamenca de señora es un cantidad bastante justita. De hecho me ha sobrado un pequeño trozo, que guardo por si en el futuro hay que hacer algúan arreglo.

La pega que sí le pongo a la tela es que se arruga con solo mirarla. Cada vez que planchaba una costura, se arrugaba por otra parte. Y después de estar sentada, parecía un higo. El poco de elastán que lleva la tela lo hace muy cómodo pero si es verdad que al levantarme después de estar mucho tiempo sentada la parte del culete da un poco de sí. Supongo y espero que al lavarlo la tela vuelva a su ser. 

Con todo, yo he ido muy feliz con mi vestido hecho por mí a pesar de que tiene algunos fallos y de que el patrón lo hice así de aquella manera. ;)

No me preguntéis qué estamos haciendo en esta foto (jejeje) pero era en la que mejor se veía el vestido por la espalda y el vuelo tan bonito que tiene el bajo y el escote de la espalda. 

Pues hasta aquí la entrada de hoy. Espero que os haya gustado. Yo he lucido mi vestido orgullosa por el Real de la Feria y con eso me quedo. Aún quedan tres días de Feria por si algun@ se anima a venir. 

Un besote.