Tarde en la "velá"

Hola chic@s! Alguna se habrá extrañado al leer el título de esta entrada porque no sabrá lo que es una velá. Una velada (velá, en andaluz) no es otra cosa que una fiesta de barrio. Por Sevilla son (o eran) muy típicas las velás, adquiriendo algunas mucha fama dentro y fuera de la provincia. Especialmente famosa es la velá de Santa Ana que se celebra en el Barrio de Triana, que tiene la categoría casi de feria en miniatura y por la que se pasea lo más granadado de la sociedad sevillana. 

Velá de Santa Ana en Triana

Mucho más modestas y familiares eran las velás de los barrios menos famosos de Sevilla. Y digo eran porque desgraciadamente este tipo de verbena popular está perdiendo cada vez más importancia e incluso algunas han llegado a desaparecer. Las velás eran las fiestas grandes de cada barrio, en las que todos los vecinos se implicaban aportando lo que podían: dinero, comida, trabajo y sobre todo muchas ganas de divertirse. El Ayuntamiento, las asociaciones culturales y vecinales, los partidos políticos y los sindicatos, también participaban aportando dinero, premios, regalos, etc. Recuerdo cuando era pequeña la ilusión que nos hacía a los niños del barrio el comienzo de las fiestas. Las de mi barriada coincidían con el fin del cole y el comienzo del verano y todos estábamos deseando de poder escapar del control paterno durante un par de horas para ir a montarnos en los cacharritos. Los precios eran populares así que los padres también bajaban a tomar unas tapas y unas cervecitas mientras alternaban con los demás padres y conocidos. Aún conservo algunos de los colgantes y pendientes que nos comprábamos en los puestecillos hippies que instalaban para la ocasión y que cuando yo tenía 12 o 13 años eran el no va más.

Por desgracia nuestra sociedad ha evolucionado hacia unas formas de vida más individualista. Con las mujeres incorporadas a la vida laboral se ha perdido mucha vida de barrio. Ya casi no conocemos a los vecinos. Antes, si mi madre se quedaba corta en la cena iba a casa de la vecina a perdirle un huevo. O si tenía que salir de manera urgente nos dejaba a su cuidado. ¡¡Y yo me dí cuenta de que mi vecina estaba embarazada cuando le quedaba un mes para parir!! En fin, las cosas cambian y la vida evoluciona y aunque me pongo nostálgica recordando estás cosas (será el SPM..jeje), tenemos que saber adaptarnos a todos estos cambios con alegría y buen humor.

Bueno, todo este rollo nostálgico-reivindicativo, viene a cuento porque durante estos días se está celebrando la velá del barrio donde vivo ahora. Aunque yo no la he conocido en su época de esplendor (llegó a tener más de 25 casetas), tengo que decir que la que se celebra actualmente no está nada mal a pesar de la crisis. Eso sí sólo hay una caseta gigante y unas cuantas atracciones para los peques. Irene ha estado como loca contando los días para que empezase la "feria". Así que como dan lluvia para el fin de semana, hemos aprovechado la tarde del jueves para disfrutar de las atracciones. Os dejo unas fotos de esta tarde para que os hagáis una idea.

 Era temprano y aun había poca gente

Elena es aun pequeña para entrar ahí..jeje

Bueno chicas, perdonad esta entrada tan poco costuril, pero no sólo de costura vive el hombre (ni la mujer..jeje) y de vez en cuando me gusta escribir de las cosas que se me pasan por la cabeza.. Ahora os podéis hacer una idea de lo que es una velá.
Un besote.