Hola de nuevo chic@s! Estamos en pleno mes de mayo, mes por excelencia de las Comuniones. Si os digo la verdad, la primeras comuniones son la ceremonia religiosa/evento social que menos me gusta. Quitando el aspecto religioso en el cual no entro ya que eso está en la conciencia de cada uno, pienso que los padres estamos perdiendo un poco la cabeza.
Hablando el otro día con una compañera de trabajo me comentó que el pasado fin de semana había estado en una comunión en la que los padres le habían "regalado" al niño una limusina Hummer con chófer para que se pasease por el barrio con todos sus amigos.
Foto tomada de www.tcblimusinasevilla.com
Ni que decir tiene que flipé en colores. Pero más allá de lo pintoresco del regalito, lo que me dió más que pensar es que los padres del chaval no eran precisamente adinerados y la bromita les había salido por un pico considerable.
Entiendo que de cara a la comunión de un hijo se haga un esfuerzo económico, personal y familiar. Y entiendo que una vez que estás metida en el ajo, las cosas puedan salirse un poco de madre. Pero lo que no entiendo y creo que nunca llegaré entender es que familias que lo están pasando realmente mal, que sabes que pasan dificultades, se endeuden hasta las cejas con tal de que su hij@ tenga una fiesta por todo lo alto.
Hoy en día hemos pasado del discreto desayuno a base de chocolate con churros que tuvo mi madre, al obligado viaje familiar a Eurodisney con motivo de la primera comunión. Y es que si todos los niños de la clase van a Eurodisney, el mío no va a ser menos, no? Yo no sé que haré en su día y si mis hijas llegarán o no a hacer la comunión, pero al día de hoy creo que de seguir así estaremoscriando a una generación de niños con tolerancia cero a la frustración acostumbrados a tenerlo todo ahora y ya, y que valoran poco lo que tienen.
Hace un par de años asistí a la comunión de las hijas de unos conocidos. Los padres, trabajadores de a pié, habían tirado la casa por la ventana y habían montado una celebración por todo lo alto con más de 120 invitados. Tal y como estaba organizado todo, aquello parecía más una boda que una Primera Comunión. No faltaban, por supuesto, el castillo hinchable ni el carrito de chucherías, cosas que me parecen más apropiadas para niños, que al fin y al cabo, no lo olvidemos, son los protagonistas de este día. Lo que me llamó la atención realmente fue el momento de apertura de los regalos. Las niñas se juntaron al menos con 25 o 30 paquetes cada una, sin contar los regalos en metálico. Iban abriendo los paquetes con desidia y con desgana, uno detrás de otros, como el que pela pipas, sin apenas reparar en ellos. Y os puedo decir que había regalos realmente apetitosos : PSPs, MP4s, videojuegos, la Rock Band para la Wii, pulseritas y pendientes,ropa, libros, etc.. La niñas mostraban poco o nada de entusiasmo y solo estaban pensando en irse a saltar al castillo. La pobre madre intentanba suplir con su entusiasmo el que les faltaba a sus criaturas. Ni que decir tiene que mis conjuntos playeros de chanclas, bikinis, toallas y bolsas que tanto me costó encontrar pasaron totalmente desapercibidos..
En esta me acordaba yo de mi cara de felicidad al ver mi super reloj digital Casio y mi walkman blanco a juego.. y la de muñeca de primera comunión que me regaló mi abuela y que cantaba hasta una cancioncilla: "este es tu día más feliz, es tu Primera Comunión..la la lá.."
¡Cómo pasa el tiempo y qué inocentes éramos! Yo no soy de las que piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor. Pero desde luego si el futuro nos conduce a la sinrazón de ver familias azotadas por la crisis sacando de donde no hay solo por el aparentar, prefiero quedarme en el pasado, oiga.
Con todo, como siempre digo, en el justo medio está la virtud y creo que es posible hacer una celebración bonita, familar y sobre todo dedicada a los niños, ajustada a los tiempos que corren.. y que yo sepa ninguno de mi generación hemos muerto por no haber ido a Eurodisney, ni haber fardado por las calles del barrio subido en limusina.
yo soy la madre de los dos "únicos niños del patio" que no han ido a Eurodisney, pero...
ResponderEliminarEn casa celebramos la comunión de nuestros hijos con un almuerzo familiar y luego los niños fueron con algunos amigos a celebralo a un centro de esos de bolas, donde se celebran los cumpleaños. Sinceramente no creo que se lo pasasen peor que si hubiese dado un almuerzo para 100 personas. El regalo que más gusta a los niños, por nuestra experiencia, un balón de reglamento y unos guantes de portero, el detalle que mi hijo tuvo con los niños que fueron a su comunión fueron balones de plástico de esos de un euro, todos los niños, nuestros invitados como los otros niños de las bolas venían a preguntarnos que cuando regalábamos las pelotas!
Me ha parecido una idea estupenda lo del balón. A veces las ideas máas sencillas son las mejores. Si vieras la cantidad de detallitos de comuniones que se acumulan y que acaban en la basura. Da pena.
EliminarUn beso Paqui
Hola María, yo tengo la comunión de Andrea el sábado, y desde un principio decidimos que sería una celebración familiar, como extra solo invitaría a sus dos amigas íntimas, no íbamos a pagar un menú de boda, los detalles y las invitaciones los hemos hecho en casa, no hay hinchables… y no nos vamos a Eurodisney; mi hija ha disfrutado mucho con los preparativos, le encantan los detalles que vamos a dar, colaboró en las invitaciones, le encanta que su padre vaya a hacer globoflexia, y entiende el significado de lo que celebramos, desde luego ha tenido regalos, pero los hemos dosificado y desde luego todo han sido cosas que puede utilizar ahora, el dinero lo guardaremos para cuando necesite un portátil o alguna otra cosa que ahora mismo no va a usar, nuestro regalo especial será que en las vacaciones de verano vamos a ir a ver un oceanográfico especial ( a ella le encantan y lo disfrutaremos todos ) y sinceramente no creo que mi hija vaya a estar traumatizada por como hemos decidido celebrar su comunión. Como te puedes imaginar en su clase hay comuniones de todo tipo, algunas íntimas y otras que han invitado a toda la clase, en alguna hay más invitados que en mi boda, hay padres que se han visto “obligados” por como lo celebran los demás, pero sinceramente creo que una buena lección que podemos enseñar a nuestros hijos es a ser coherentes con lo que pensamos y no dejarnos llevar por las opiniones de los demás. Un besito.Olga
ResponderEliminarOlga, chapó a tu comentario. Me alegra saber que hay gente coherente con sus ideas y con las circunstancias que nos rodean. Tu eres de las mías. Yo pienso que si puedes permitirtelo y es tu gusto cada uno que lo haga como quiera. El problema está en el quiero y no puedo que es lo que vengo a decir aquí.
EliminarUn besote guapa
JIJI!!, María es que a mi me pilla muuuuy cerca...y menudo año llevamos con el temita
EliminarMaría, en estos casos me viene al pelo mi muy usada expresión "hay gente pa'to", por supuesto no voy a criticar a nadie por como educar a los niños pero a veces pienso que estamos perdiendo la cabeza.
ResponderEliminarUn besito
Pues sí Isa. Hay gente pa tó.
Eliminara mi tambien me regalaron una muñeca de comunion.. y no se me ocurrio otra cosa que pintarle el pelo de azul XD
ResponderEliminarhttp://mandarinacosturera.blogspot.com.es/
Maria, cada uno puede hacer lo que quiera!!, pero yo soy de tu opinión... Para empezar... yo soy de las que piensan que hay que gastar acorde con lo que se tiene en casa..
ResponderEliminarMi primera comunion fue muy normalita, lo normal de hace taitantos años... reunion con la familia y a comer todos juntos y me cayeron los regalitos tipicos de entonces y yo tan feliz!!!.
Recuerdo que lo más me gustó de ese día fue estar vestida con mi super vestido de comunicación!!!!.
Muchos besitos guapisima y me encantan tus entradas, con estas reflexiones... que nos haces..
La gente se ha vuelto loca con lo de las comuniones. Yo a la mía fuí con vestido y casquete prestado, porque entonces no nos podiamos permitir para un ratito un vestido de comunión,Creo que tuve tanto cuidado en no mancharlos que el recuerdo fuerte que tengo es dar vueltas con un vestido amarillo que me compró mi madre para después y que me lo pudiera poner un montón de veces.
ResponderEliminarEstoy totalmente deacuerdo contigo María, me has dejado con la boca abierta con lo de la limusina!, es increible!, la verdad es ue sí, a algunos padres se le ha ido la cabeza con as comuniones, y más bien parecen bodas..., por no decir de los regalos...a mi también me regalaron un walman y un reloj como a ti, y la muñeca de comunión con la velita en la mano, y una cámara de fotos. Esos fueron mis regalos, y que feliz fuí con ellos...ahora, limusinas, viajes a disneyland o video consolas...las cosas se nos están yendo de las manos...
ResponderEliminarUn beso.
Yo estoy completamente de acuerdo contigo... A mi personalmente me da miedo a dónde se está llegando con esto de las Comuniones y la verdad es que de todos los eventos es el que menos me gusta... Tengo la sensación de que ha perdido completamente su esencia, se ha materilizado muchísimo. Una pena, la verdad. Mi Comunión fue una cena en mi casa con toooda mi familia y amigos íntimos (qué valor tuvo mi madre porque aun recuerdo las cortinas del salón y uno de los radiadores manchados de merengue) y mi traje me lo hizo ella, todo el cuerpo bordado en punto inglés con unas perlitas pequeñitas que cosió entre las flores... Se quedaba hasta las tantas cosiéndolo porque es profe y por las mañanas tenía que trabajar y por la tarde lidiarnos a los tres (yo de 8 era la mayor), tiene mucho mérito... Como para no valorarlo...
ResponderEliminarSuscribo tus palabras María, aunque hay gente pa'tó, hay gente con muy poco sentido común, que se gastan una pasta en eventos (léase bodas, bautizos, comuniones, cumpleaños...) sin tener un pavo, empeñándose hasta las cejas y luego son de los que no pagan la comunidad, por ejemplo. Y me da un coraje que reviento, no lo puedo evitar!
ResponderEliminarA mi también me regalaron la Leslye de comunión, un joyero de nácar y alguna cosa más pero lo que recuerdo con más ilusión es la tarta, una San Marcos adornada con fresas :-))
Maria tienes toda la razón, la gente convierte las comuniones en bodas y se endeudan de lo lindo, porque en la boda recuperasalgo de dinero de lo ijveryido pero en una comunion nada, los regalos son de los niños y el dinero para el dichoso viajecito a Eurodisney.
ResponderEliminarYo lo tengo clarisimo, familiar y algunos intimos sies q nos da el presupuesto.
Otra entrada es vestidos de comunion, que valen una pasta y algunas niñas van vestidas de autenticss novias.
Bueno besitos chaooo