Espejito, espejito review: Otoño/Invierno 2013

Hola chic@s! Se ha hecho de rogar, pero aquí está de nuevo mi repaso del último número de la revista Espejito, espejito. Y es que ha tardado casi un mes en llegar aquí. El del kiosko ya me conocía y todo, pero no podía dejaros sin mi repaso, no?

Bueno, en primer lugar debo decir que este número de Espejito es bastante correcto. Dentro de su estilo clásico y sus telas pelín recargadas (para mi gusto, eh?) hay bastantes vestidos ponibles y hechuras monas.

Los abrigos en general me han gustado bastante, quitando alguno raro tipo Cruella de Vile muy poco favorecedor. Aunque leyendo las escuetas explicaciones de la revista no sé yo si me atrevería a cortar un abrigo.

El rosa me gusta un poquito más largo. Pero el otro es dálmata total. 

Este me gusta mucho pero las lorzas me echan para atrás.

Además, se atreven con modelos más acordes para niños y niñas más mayorcitos. Los looks de niñOs mayorcitos me parecen muy acertados para llevarlos arreglados sin excesos.

 Como siempre el pobre Yaguito, en mi humilde opinión, se lleva la peor parte... supongo que  es cuestión de gustos y que en el próximo número pasará ya a otro estilo.

 Si no tenéis ningún número de la revista, este puede ser una buena opción para empezar, ya que son vestidos básicos de toda la vida. Pero ¡ojo!, hablo de los modelos, no de los patrones. Yo no he probado ninguno de este número aún, pero las chicas del Facebook están que trinan con los patrones de la revista. Siguen siendo enoooormes y desproporcionados. Porque una cosa es que tallen grande y otra que para una niña de 5 años le tengas que cortar un ancho de pecho de la talla 1. Además algunos patrones no se corresponden con el modelo de la foto, como podéis ver en el caso de este abrigo rosa, que en la foto lleva cuello mao pero en la hoja de patrones lleva cuello bebé.

Pero bueno, como hoy vengo en plan conciliador, os diré que lo que yo hago es plantar encima de la hojas de patrones un patrón base que tengo para mis hijas y por ahí me voy guiando.

Sin embargo, después de una lectura más detenida me llevo dos conclusiones importantes: 

1ª.- Estoy firmemente convencida de que los de la revista hacen los vestidos de la talla que les da la gana y luego buscan a algún niño al que le entren. Si no, ¿cómo se explica que para la misma niña haya vestidos minifalderos-casiindecentes y otros meones-monjiles? Y ¿por qué con lo que gustan de vestines cortitos, los bebés parecen que llevan bata-mantas? Hay vestido de bebés muy monos, pero hijas mías con unos largos que echan para atrás. A lo mejor van con la idea de que se pueden aprovechar durante muchos años...digo yo.

 2ª.- La segunda conclusión que saco es que la crisis también ha llegado a Espejito. No sólo porque repiten modelo y patrón en la misma revista,

La única diferencia es la capota. Las tallas y el patrón es el mismo

,sino porque algunos looks dejan mucho que desear. Ya sabéis que yo no soy una obsesiva de combinar al mínimo detalle zapatos, leotardos, lazos, etc.. De hecho pienso que unos zapatos de color básico pueden ir con varios vestidos... pero yo no soy una revista de moda infantil, ni tengo su presupuesto. Y es que hay algunas combinaciones que dañan la vista. Como este de vestido con fondo gris-pardo, leotardos burdeos y zapatos blancos. Sí si, blancos. Se ve que el stock de zapatos se acababa y que a los niños les va creciendo el pie..hijos míos eso es lo que hay y hay que combinar como se pueda. (jeje)

Bueno, bromas aparte, me reitero en lo dicho anteriormente: se trata de uno de los número más correctos y aprovechables por su sencillez sobre todo para bebés hasta dos añitos, aunque si tienes ya varias revistas no te es necesario comprarla. Tristemente el panorama español de revistas de patrones infantiles es muy reducido y de estilos bastante dispares que van desde el clasicismo de Espejito al estilo casi grunge de algunos modelos de Burda. Pero bueno es lo que hay y con eso nos tenemos que apañar. Yo siempre digo que cualquier cosa puede servir de inspiración. Ayer sin ir más lejos una amiga me decía que se hallaba perdida en cuanto a mis gustos para niños. Y la verdad es que pensandolo, creo que soy bastante ecléptica. Les pongo casi de todo según la ocasión, pero en general le dije que me gustan las niñas vestidas de niñas mientras sean niñas, y al igual que a una niña de 7 años no le colocaría un vestido tipo marito, a un bebé de 2 años jamás lo vestiría de leopardo o de negro.

En fin, que con esta reflexión me despido hasta la próxima entrada. Feliz miércoles a todas. 

Besos